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Jornada Nacional de Oración por los fallecidos a causa del Covid-19 | Homilía de Monseñor Oscar Ojea

Monseñor Oscar Ojea presidio en la Catedral de San Isidro la celebración de la Misa en el marco de la Jornada Nacional de Oración por los fallecidos a causa del Covid-19. Mediante su homilía Monseñor Ojea compartió:

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"Hoy la iglesia argentina celebra una Jornada por nuestros hermanos difuntos que han partido, especialmente en este tiempo de COVID, y también por otras enfermedades; pedimos especialmente por ellos, pedimos por sus familias”, expresó monseñor Ojea al comenzar la misa que presidió en la Catedral de San Isidro en el marco de la Jornada Nacional de Oración por los fallecidos por COVID-19, y que concelebró junto al Obispo auxiliar Guillermo Caride y el Pbro. Pedro Oeyen, Párroco emérito de la Catedral.

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Posteriormente Ojea dijo que “hemos querido hacer esta Jornada de Oración también, teniendo en cuenta las condiciones tan penosas en la hemos vivido estas partidas” y agregó que “tantas familias que no han podido despedirse de sus seres queridos; tantas dificultades para visitar enfermos, las restricciones”.

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“La palabra parto es una palabra tan rica en castellano, quiere decir partir, cortar, cortar el cordón umbilical es nacer, por eso hablamos de parto, de corte; pero la partida también es un viaje, es una promesa, una aventura” explicó el Obispo, quien luego aseveró que “para el cristiano la muerte también es un parto, es un nacimiento a una vida nueva, un nuevo modo de nacer”.

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Refiriéndose al texto del Evangelio leído en la celebración, monseñor Ojea señaló que “Jesús quiere contener a sus discípulos ante la inminencia de su partida, y les dice que no se va a despedir de un modo definitivo” y “el Señor lo explica como un estar preparando la casa grande del Padre para toda esa Iglesia naciente; esto quiere decir que seguimos en contacto, aunque se da este paréntesis sacramental del tiempo”, y nos animó diciendo que “cuando parte un ser querido podemos utilizar esta imagen, tan verdadera y tan consoladora de Jesús”.

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“Se abre entonces ese paréntesis de tiempo entre ellos y nosotros, pero seguimos unidos en el caminar, y sostienen y fortalecen nuestra fe y esperanza”, continuó explicando monseñor Ojea.

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Hacia el final de su mensaje el Obispo nos invitó a agradecer el haberlos tenido “recordando todo lo que nos han dejado, y le pedimos al Señor poder hacer más fecundo todavía, aquello que nos ha dejado a través de ellos”.

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“Le pedimos al Señor poder vivir este tiempo difícil en profunda unión con Él desde la fe; la muerte no tiene la última palabra para un cristiano, sino la vida. Pidámosle poder honrar al Dios de la vida en este tiempo, sirviéndola y cuidándola en todas sus etapas y en todos sus aspectos”, cerró expresando su homilía monseñor Ojea.

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Buenos Aires (San Isidro), viernes 23 de julio de 2021.

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+ Monseñor Oscar V. Ojea

Obispo de San Isidro

Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina

Documentos disponibles:
Mons.-Ojea.-Homilia-Jornada-Oracion-Fallecidos-Covid-19.-230721.pdf





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